Y para poner
el broche final a las jornadas micológicas el sábado 26, también en el salón de
actos de la Hospedería de la UAH, se celebró una mesa redonda con la participación
de algunos de los excelentes jefes de la cocina de los restaurantes seguntinos.
Los restauradores fueron Samuel Moreno (Rte. El Molino de Alcuneza) y Jorge
Maestro (Rte. Nöla), estaba programada también la asistencia de Enrique Pérez
(Rte. El Doncel) pero obligaciones laborales le impidieron acompañarnos y nos
solicitó que le disculpáramos ante los asistentes por su ausencia.
Además
también participaron Pilar Martinez, cronista oficial seguntina, que fue la
encargada de introducirnos en el tema a tratar en la mesa de redonda. En su introducción, Pilar, nos recordó la
labor de los primeros impulsores de la divulgación de las setas en la cocina en
Sigüenza, que fueron principalmente su padre Juan Antonio Gómez – Gordo y Jose
Maria Morera, ambos tristemente desaparecidos, que entre otras muchas cosas dedicaron
un número del boletín “Sigüenza Gastronómica” a las setas.
Y estuve yo presente,
como presidente de la sociedad micológica y cocinero aficionado con cierta
experiencia en la preparación de las distintas especies de setas.
Fue
una lástima la escasa asistencia porque se trataron temas muy interesantes y fue
una gran satisfacción personal poder comprobar la gran participación de los
asistentes con sus preguntas y sus acertados comentarios.
Y aquí señalar que por
las observaciones que recibí al terminar la mesa redonda y los días posteriores,
los asistentes disfrutaron del evento y aprendieron bastante sobre las setas y
la cocina.
Para
finalizar reiterar mi agradecimiento a todas las personas que han asistido a
cualquiera de los eventos que programamos y a todas las personas que han
colaborado con los miembros de la Sociedad Micológica de Sigüenza tanto para
difundir la información de las jornadas, como para que los lugares donde se
celebraban los distintos actos estuvieran listos y para ayudarnos en todo lo
que fuera necesario para que todo saliera lo mejor posible.
El fin de semana
del 12 y 13 de noviembre se celebro la inauguración oficial de las Jornadas Micológicas.
El viernes 11 fue un día duro porque ademas de recolectar las distintas especies de setas, hubo que identificarlas y preparar la exposición de los ejemplares y colgar las fotografías para que todo estuviera preparado para la inauguración la mañana siguiente.
La presentación estuvo presidida por el Alcalde de Sigüenza y en ella nos juntamos miembros del ayuntamiento, cocineros seguntinos, miembros de la sociedad micológica y miembros de empresas de turismo.
La acto inaugural y la exposición tuvieron lugar en la
ermita del Humilladero y como este año ha sido escaso de lluvias, fue
complicado encontrar mucha variedad de setas de las que se dan en nuestra
comarca. Pero tras muchas horas de patear nuestros distintos ecosistemas,
conseguimos exponer 61 especies distintas de setas.
Con las distintas especies recolectadas pudimos explicar a todas las
personas que se pasaron por la exposición las diferencias entre los distintos
géneros de setas, cuales son comestibles, tóxicas o venenosas. Recomendarles
alguna forma de cocinar las setas comestibles u otras facetas y curiosidades de
estas maravillas que nos proporciona la naturaleza. Además de ayudar a identificar
los ejemplares de setas que muchas personas nos trajeron a la exposición y que
ellos habían recogido durante estos días.
Este año
además, al mismo tiempo que se celebraba la exposición de ejemplares, teníamos
expuestas 15 fotografías de setas comestibles de nuestra comarca, que durante
el resto del mes estuvieron expuestas en la sala “La Galería” situada dentro de
la oficina de turismo.
Gracias a todas las personas que nos visitaron por los
ánimos que nos dieron y a las felicitaciones que recibimos.
Os dejo mi intervención en la presentación.
Volver a agradecer a Javier Bravo su colaboración con algunas de las fotos y el vídeo de esta entrada del blog.
Despedimos el año micológico 2016 con un breve resumen de las Jornadas
Micológicas de Sigüenza. Que han supuesto las XV jornadas micológicas para la
Sociedad Micológica de Sigüenza pero las
I Jornadas que celebramos en colaboración con el Ayuntamiento de Sigüenza,
dentro de los eventos de Sigüenza Gastronómica, y con algunos de los
establecimientos hosteleros de la ciudad.
Las Jornadas fueron presentadas en Guadalajara, de manera oficial, el 10 de noviembre en rueda de prensa en la que estuvieron presentes Jose Manuel Latre. alcalde de Sigüenza y Presidente de la Diputación de Guadalajara; Jorge Maestro, Chef del restaurante Nöla; y yo, como presidente de la Sociedad Micológica de Sigüenza.
En ella presentamos los distintos eventos, que conjuntamente con el ayuntamiento, preparamos para
acercar el mundo de la micología y la micogastronomía tanto a los seguntinos
como a todas las personas que nos visitaron durante este mes. Las jornadas se
establecieron entre los días 5 y 27 de noviembre, aunque por la coincidencia
con el certamen de pinchos de Consuegra el primer acto público no se realizó
hasta el fin de semana del 12 y 13 de noviembre.
Además dimos a conocer también el cartel oficial de las jornadas.
Os dejo también un pequeño vídeo de mi intervención en la presentación.
Agradecer las fotografías y vídeos de Javier Bravo, que nos acompañan en la entrada de este blog. Y a Patri Dubre por su viñeta.
En pocos días espero poder tener preparada la entrada sobre las Jornadas Micológicas de Sigüenza con un amplio resumen de todos los actos que se celebraron. Y también el resumen de la comida que los miembros de la Sociedad celebramos para dar por terminados todos los actos públicos referentes a la Sociedad micológica en este año. Mientras tanto os dejo un vídeo donde se muestra un poco la magia del menú micológico que nos prepararon en el Restaurante "El Doncel" de Sigüenza.
El pasado sábado día 19 de noviembre tuve el honor de ser invitado a participar en los actos del proyecto "Un Olmo, Mil Historias".
Como se puede apreciar en una fotografía del francés Laurent del año 1865, la Alameda de Sigüenza era un parque para el disfrute de todas las personas que vivían o visitaban Sigüenza. La frondosidad de sus arboles proporcionaban un excelente lugar donde pasar las horas más calurosas de los meses estivales.
Y así permaneció durante muchos años, como se puede observar en las increíbles y maravillosas fotos del fotógrafo bilbilitano E. Vidal y que ha conseguido recopilar y guardar Juan Carlos García Muela.
O en otras más recientes pero igual de fantásticas y espectaculares del seguntino José María Cantarero. Donde se puede apreciar la belleza y porte de los espectaculares olmos que poblaban la Alameda.
Pero en la década de los 80 del XX. Los olmos de la Alameda se vieron afectados por la grafiosis
y a pesar de los esfuerzos por salvarlos, decenas de ellos murieron y tuvieron
que ser cortados para tristeza de todos los seguntinos. Gracias de nuevo a las excelentes fotografías de José María Cantarero tenemos constancia de aquellos aciagos y tristes días.
Pero ha pasado el tiempo y en este noviembre del año 2016, gracias
a la Asociación FAGUS y a su programa “Un
Olmo, Mil Historias”, que junto a con la Dirección General de Desarrollo Rural y Política Forestal del Ministerio de
Agricultura y a la E.T.S. de Ingeniería de Montes de la Universidad Politécnica
de Madrid, Asociación micorriza, Grupo de anillamiento Aegithalos, Ecologistas en Acción Guadalajara y WWF - Guadalajara, hoy es posible volver a contar en nuestra Alameda con un olmo que
esperamos disfruten, ya centenario, las generaciones venideras.
La jornada estuvo dividida en dos partes. La primera
tuvo lugar en el Auditorio de El Pósito. Tuvo como maestra de ceremonias a Eva Plaza, teniente de alcalde de Sigüenza, y en ella intervino primero la
cronista oficial de Sigüenza, Pilar Martínez Taboada, que calificó la de ayer como una “jornada
de renacimiento”.
El segundo ponente fue la persona que desde su posición de alcalde de la ciudad, tuvo que tomar la dolorosa decisión de cortar los olmos muertos por la enfermedad, Juan Carlos García Muela. Estos tristes acontecimientos sucedieron en el
año 1989. Por eso, para Juan Carlos, el de ayer fue un día especial, como manifestó en
su intervención. “Teniendo en cuenta aquella desgracia, para mi es un motivo de
satisfacción comprobar que los olmos tienen porvenir otra vez en Sigüenza. Así,
albergo la esperanza de que volvamos a recuperar el esplendor de La Alameda, ya
que tanto nos dolió a los seguntinos su pérdida”, valoraba ayer. García Muela
calificó la toma de la decisión de apear los árboles como “un trauma, para mí y
para toda la corporación”.
El siguiente en intervenir fui yo, desde el ayuntamiento me pidieron que comentará que es lo que perdió la Alameda con la grafiosis que acabó con los olmos. En mi modesto conocimiento y por lo que pude experimentar esos años, además de la frescura que proporcionaba la inmensa sombra que nos brindaban sus pobladas copas, quien más la sufrió fue
la biodiversidad seguntina, empezando por las aves trogloditas que vivían en
los huecos de los grandes árboles. En esos huecos anidaban carboneros, herrerillos, trepadores azules y agateadores comunes, además de algunas especies tan emblemáticas como el cárabo, el mochuelo o el autillo. Los
silbidos característicos de esta última especie cuando estaba en celo, y su canto intentaba atraer a la hembra y marcar su territorio a otros machos, nos indicaba que ya el buen tiempo y el calor ya estaban aquí., También se perdieron otras especies que también usaban sus huecos para criar como ardillas, ratones o alguna garduña, pero sobre todo, los
murciélagos. Todas estas aves y animales, en su mayoría insectívoros, nos
ayudaban a combatir las plagas de mosquitos, que después de la muerte de los olmos se ha intentado combatir fumigando la alameda sin que sirviera para nada, es más era algo totalmente contraproducente porque esa guerra química contra los mosquitos producía también un cuantioso número de victimas entre nuestras aves aliadas.
Por último, se perdió la mejor orquesta imaginable,
que era el canto de esas aves en época de celo.
Luis Gil, catedrático en la Escuela de
Ingenieros de Montes de Madrid, fue el siguiente de los ponentes. Luis ha
trabajado en el proyecto de la recuperación de los olmos desde 1986, año a
partir del cual “toda España sufrió la muerte de los árboles más importantes y
más abundantes que existían en España”. La
grafiosis despertó una gran sensibilidad y el amor por los árboles perdidos, de
manera que para Gil supuso “un reto, tratar de devolverle a la sociedad una
especie que prestaba su nombre a tal cantidad de pueblos, apellidos o topónimos”.
Conseguirlo, al cabo de treinta años, ha significado para el profesor “una
satisfacción personal enorme”. Además Luis repaso la historia de esta especie de arboles a lo largo de la tiempo. Fue una interesante y brillante exposición gracias a la cual aprendimos muchas cosas sobre estos bellos arboles.
El último
ponente fue David León. El técnico de la Dirección General de Desarrollo Rural
y Política Forestal del Ministerio de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio
Ambiente. David nos enseño el trabajo que realizan y las dificultades que sean encontrado a lo largo de los años para conseguir el éxito actual. Nos enseño que el
programa español es heredero de otros, sobre todo de uno holandés, que fue el
que sentó las bases de estas investigaciones, “aunque conviene destacar que
España ha sido el único país que ha obtenido el único individuos resistentes de
la especie pura del olmo común”.
La segunda parte del acto se celebró en La Alameda. Cerca de la iglesia
de Nuestra Señora de Los Huertos, que es lugar donde se arranco el último de los olmos, la Brigada de Obras Municipal había preparado un alcorque para plantar el olmo resistente a la grafiosis. El hoyo realzado por una hornacina hecha de piedra labrada para remarcar la importancia que tiene este árbol para Sigüenza. Con la dirección de la maestra de ceremonias, Eva Plaza, el acto continuo con la ayuda de Gregorio Garijo, responsable de la Brigada
de Obras, y representantes de FAGUS, que plantaron el ejemplar de olmo y lo regaron para que se asentara.
Acto seguido, Juan Carlos García Muela y Eusebio López, durante muchos años
jardinero de La Alameda, descubrieron la placa conmemorativa.
Leyeron el texto de la placa la cronista oficial de la ciudad Pilar Martínez, que leyó unas
frases de su padre, que fuera también alcalde seguntino y cronista de la
ciudad, Juan Antonio Martínez Gomez - Gordo, recogidas en la cerámica, y el profesor Luis Gil.
Para finalizar el acto se realizó una foto de todos los participantes en el acto.
Solamente me queda reiterar mi agradecimiento al ayuntamiento de Sigüenza y especialmente a Eva Plaza por permitirme formar parte de este acto de recuperación de los olmos en la Alameda seguntina.
Agradecer también a José María Cantarero, Juan Carlos García Muela, Javier Bravo y a las personas del proyecto "Un Olmo, Mil Historias" por la mayoría de las fotografías de esta entrada.
A continuación os dejo una serie de vídeos de Javier Bravo sobre el acto.
Esperemos que este joven olmo sea el primero de muchos que devuelvan a nuestra Alameda ese precioso aspecto que muchos de nosotros nunca más volveremos a ver, pero que futuras generaciones nos agradecerán. Y que esperemos que amen tanto como nosotros amábamos a los antiguos olmos seguntinos.
NOVIEMBRE MES DE LA MICOLOGÍA Y LA GASTRONOMÍA EN SIGÜENZA
Terminamos el mes de Octubre, con un fin de semana de breves conferencias dedicadas al mundo de los hongos desde distintos puntos de vista: "Gastronómico" a cargo de Nacho Amo, "sobre los distintos hábitat" con Javier Munilla y "usos de las setas en diferentes culturas y épocas" por Julio Álvarez. Estas conferencias fueron organizas por el bar "Las Travesañas" de Sigüenza, más información en el siguiente enlace: http://www.laplazuela.net/new/index.php/rapidas/10430-charlas-sobre-setas-en-el-bar-las-travesanas-de-sigueenza. Ahora nos tomamos unos días para preparar las XV Jornadas Micológicas de Sigüenza, que este año traen muchas novedades. Para empezar la duración y especialmente la implicación de restaurantes y bares para que todos los que durante estos días de noviembre nos visiten puedan disfrutar de menús y tapas con especial protagonismo de las setas. Además volvemos a contar con la colaboración del Ayuntamiento de Sigüenza y otras asociaciones.
Las jornadas comienzan el día 5 de noviembre y finalizaran el 27 del mismo mes. Los días 12 y 13 de noviembre en la "Ermita del Humilladero" tendremos la tradicional exposición de los ejemplares recogidos para que puedan ser observados, tocados y donde podrán preguntarnos a los miembros de la Sociedad cualquier duda que se les pueda presentar. El horario de la exposición sera sábado de 12:00 a 15:00 horas y de 18:30 a 20:30 horas y el domingo de 12:00 a 14:30 horas. Además en el mismo lugar podrán ver una colección de 15 fotografías de setas comestibles de la comarca, que podrán seguir viéndose desde el día 14 de noviembre en la sala de exposiciones de "La Galería", situada en la Oficina Municipal de Turismo, calle Medina 9. El sábado 19 Noviembre a las 18:00 horas en el Salón de actos de la Hospedería de la Universidad de Alcalá de Henares de Sigüenza, situado en la calle Mayor 50 y con entrada por la calle Arcedianos, junto a "La Plazuela de San Vicente" y "La casa de El Doncel". Tendremos una conferencia sobre "Historia de la micología, sus diferentes usos y algunas leyendas". Y Para finalizar el sábado 26 a las 18:30 horas, también en el Salón de actos de la Hospedería de la UAH, tendrá lugar una mesa redonda con el protagonismo de tres excelentes cocineros de restaurantes de Sigüenza: Enrique Pérez (Rte. El Doncel), Samuel Moreno (Rte. El Molino de Alcuneza) y Jorge Maestro (Rte. Nöla). Además contaremos con la presencia de Pilar Martinez Taboada, cronista oficial de la ciudad y de mi persona como presidente de la Sociedad Micológica de Sigüenza. En esta mesa redonda disertaremos sobre "Las setas en la cocina". Os esperamos.
Los pasados días 22 y 23 de octubre de 2016 en la “Escuela
de la Naturaleza de Condemios de Arriba” colaborando la Asociación
Vasija y la Sociedad Micológica de Sigüenza celebramos las terceras
jornadas micológicas.
Que en realidad son una maravillosa excusa para acercar a los asistentes que nos acompañan al mundo natural que podemos disfrutar en nuestra fabulosa “Sierra Norte”. Por lo que podríamos decir que en realidad son unas jornadas dedicadas a la naturaleza donde intentamos enseñar a cuidarlo, respetarlo y amarlo con las setas como hilo conductor, ya que la búsqueda de setas nos permiten pasear de forma tranquila y pausada observando todo lo que nos rodea.
Una vez que estábamos todos preparados, nos hicimos la foto para la memoria del grupo.
Este año la falta de agua desde el mes de mayo no nos ha permitido disfrutar de muchas especies, ni de muchos ejemplares. Pero como he comentado anteriormente, en realidad las jornadas nos sirven para enseñar, sobre todo a los más jóvenes micólogos que nos acompañan, a disfrutar y respetar la naturaleza.
El sábado 22 el día amaneció con un poco de niebla y amenaza de lluvia para el mediodía y tras unas breves indicaciones de como debemos comportarnos, precauciones a seguir y como debemos recolectar las setas. Comenzamos la jornada.
Con las excelente condiciones meteorológicas que teníamos, estábamos listos para disfrutar de una mañana de búsqueda de setas. Comenzamos por los alrededores del campamento y como nos temíamos las setas brillaban, pero esta vez por su ausencia.
Después de un rato de búsqueda, nos dimos cuenta que era obligatorio movernos por las zonas más húmedas y allí empezaron aparecer los primeros ejemplares de setas.
Siempre ocurre con este mágico mundo de los hongos,que ocurre algo especial y esta vez tuvimos la sorprendente alegría de encontrar entre otras especies un ejemplar de Boletus edulis, la fortuna descubridora del ejemplar fue Elena.
De esta forma transcurrió la mañana, que además aprovechamos para enseñar a los más jóvenes el sabor y las propiedades de frutos silvestres como son los escaramujos o las majuelas y el cuidado de que debemos tener para no confundirlos con otros frutos tóxicos que se pueden encontrar en el bosque.
Otra de las sorpresas de la mañana fue encontrarnos con un precioso ejemplar de Hyla arbórea, comúnmente conocida como Ranita de San Antonio, la cual con extremo cuidado mostramos a todos los asistentes y les enseñamos curiosidades de este bello anfibio, mostrar el respeto que debemos tenerle ya que es una especie que está en regresión, principalmente debido a la destrucción y contaminación de sus lugares de reproducción y de la cobertura vegetal que rodea a estas zonas, quedando las poblaciones muy aisladas.
Esta pequeña ranita está considerada en el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas: De Interés Especial. Por lo tanto, es una especie protegida por ley. Además sorprendimos a muchos de los asistentes, sobre todo a los niños, cuando les explicamos que antiguamente a los habitantes de los pueblos esta pequeña ranita nos ayudaba a predecir la llegada de la lluvia, ya que es un anfibio muy activo cuando presiente que va a llegar la lluvia. No sabemos si será casualidad o no, pero había comenzado a lloviznar cuando dejamos a nuestra preciosa ranita en las ramas del joven pino donde fue encontrada.
Por lo que algunos volvieron al campamento en previsión de más lluvia y otros seguimos nuestra excursión hasta que se acerco la hora de la comida. Antes reunimos todos los ejemplares recolectados por los excursionistas para las siguientes actividades.
Tras la comida comenzamos la identificación de los ejemplares recolectados y al finalizar, mientras unos se dedicaban a preparar la mesa donde serian expuestos los ejemplares para la posterior charla.
Otros nos fuimos directos a la cocina para cocinar la degustación de algunas recetas con setas, esta actividad en la cocina la introdujimos el año pasado con mucho éxito y por lo tanto ya no podemos dejarla.
Aquí debo hacer un pequeño paréntesis para agradecer a esos excelentes amigos que se presentaron voluntarios para ayudar a la preparación de los platos y que en realidad fueron ellos los que cocinaron las setas, yo solo coordiné un poco y propuse las recetas que podíamos preparar.
Lo demás, cocinar, presentación y servirlas, fueron ellos y desde aquí felicitarlos porque todos los platos les salieron exquisitos. Como sabíamos que este año las condiciones no eran favorables para la recolección, la organización previsora compro algunas setas por si acaso y gracias a ello y a las pocas comestibles que pudimos recolectar pudimos preparar las siguientes recetas:
Champiñones (Agaricus bisporus) a la crema.
Lasaña de seta de ostra (Pleurotus ostreatus) en la que en lugar de besamel utilizamos para cubrirla crema de Boleto anillado (Suillus luteus).
Aquí estamos disfrutando de un merecido descanso mientras degustamos las recetas.
Al finalizar la degustación, pasamos a la mesa donde estaban expuestas las setas recogidas por la mañana y allí pudimos mostrar las diferencias entre los distintos géneros de setas, la comestibilidad, usos y mitos o leyendas de algunas de ellas.
El postre, por llamarlo de alguna forma, fue probar todo aquel que quiso o se atrevió, al finalizar la explicación de los ejemplare recolectados, una rebanadita de Boletus edulis crudo.
Y con esto dimos por terminado el primer día de las jornadas.
El domingo 23 amaneció lloviendo, por lo cual la actividad tuvo que centrarse en una conferencia sobre las mejores setas comestibles de la Sierra Norte y como poder diferenciarlas de las otras especies con las que pueden confundirse.
Tras la conferencia dimos por finalizadas las jornadas, esperando que el año que viene las condiciones climatológicas de
antes y de los días en que celebremos las IV jornadas sean más propicias
para la recolección de los distintos ejemplares de setas.
Muchas gracias a todos los que estuvieron con nosotros
estos días y, por supuesto, a todos los trabajadores del Campamento por lo bien
que nos tratan y perdón por todas las molestias que les ocasionamos, sobre todo
cuando les acaparamos la cocina.